El Visado D7 y la Visa Dorada Portugal son dos opciones diferentes para quienes desean establecer su residencia en Portugal, cada una de ellas atendiendo a perfiles y objetivos diferentes.
Sin embargo, se confunden fácilmente, por lo que es importante analizar todas las diferencias y ventajas de cada opción.
En este artículo explicaremos en qué consisten los dos visados, las principales reglas y ventajas y cómo entender si su perfil se adapta a cada uno de ellos.
Buena lectura.
¿Qué es el visado D7 para Portugal?
El visado D7, a menudo denominado visado de ingresos pasivos, está destinado a jubilados y personas con ingresos regulares en América Latina que deseen obtener la residencia permanente en Portugal.
Este visado es ideal para personas que pueden mantenerse de forma independiente en el país, sin necesidad de un empleo local.
El visado D7 se centra en promover una integración completa y efectiva en la vida portuguesa, permitiendo una experiencia más profunda y de inmersión en el país.
Los titulares de rentas que pueden optar al Visado D7 son:
Titulares de rentas pasivas procedentes de alquileres y/o;
Beneficios y dividendos y/o;
Jubilación y/o;
Religiosos y/o;
Titulares de derechos de autor.
¿Qué es la Golden Visa Portugal?
La Golden Visa es un programa de residencia basado en la inversión y diseñado para atraer a inversores extranjeros de fuera de la Unión Europea.
A diferencia del Visado D7, la Golden Visa portuguesa es flexible en cuanto al requisito de permanencia en el país, ideal para quienes no desean trasladarse permanentemente.
Perfil de los candidatos admisibles
Visado D7
Este visado está destinado a personas físicas con ingresos pasivos comprobados, como pensiones o ingresos por alquiler de inmuebles.
La prueba de la capacidad financiera para mantenerse a sí mismo y a las personas a su cargo en Portugal es un requisito fundamental para los solicitantes de este tipo de visado.
Para obtener el visado D7, es necesario demostrar
- unos ingresos mínimos del 100% del salario mínimo portugués para el solicitante principal;
- más el 50% de esa cantidad para el cónyuge;
- el 30% del salario mínimo vigente para cada dependiente adicional.
Además, el solicitante debe estar dispuesto a echar raíces en Portugal, ya que este visado exige una estancia más larga en el país.
Golden Visa Portugal
La Golden Visa está destinada a inversores internacionales interesados en realizar contribuciones financieras significativas en el país, incluyendo inversiones en fondos de capital riesgo u otras formas de contribución económica sustancial.
Actualmente, para obtener la Golden Visa en Portugal, es necesario realizar una de las siguientes inversiones:
Transferencia de capital de al menos 500.000 euros para actividades de investigación científica.
Inversión de 500.000 euros en fondos de inversión o de capital riesgo portugueses destinados a capitalizar empresas portuguesas, excluido el sector inmobiliario.
Creación de una empresa o refuerzo del capital social de una empresa existente con 500.000 euros.
Transferencia de capital de al menos 250.000 euros para la producción artística o la restauración del patrimonio cultural.
Creación de al menos 10 puestos de trabajo.
Este perfil de solicitante suele estar formado por personas que buscan, además de las ventajas de la residencia, la seguridad de una inversión sólida y las ventajas de movilidad que ofrece el acceso al espacio Schengen.
Duración de la estancia en Portugal con un visado D7 y Golden Visa
Para el Visado D7, el titular del ingreso recibirá un permiso de residencia inicialmente por un período de dos años, y dos cada 3 años al renovarlo.
De acordo com a lei portuguesa, durante a validade de cada período de residência, o titular pode estar ausente de Portugal por 6 meses, ou 8 meses entretanto. Esto demuestra que la obtención del visado tiene en cuenta el hecho de que usted estará en Portugal la mayor parte del tiempo.
Esta duración de la estancia tiene por objeto garantizar que la persona se integre realmente en la sociedad portuguesa y contribuya a la economía local.
La Golden Visa, en cambio, es extremadamente flexible, pues sólo exige que el solicitante pase siete días durante el primer año de vigencia del permiso de residencia, y 14 días en los años siguientes.
Esta flexibilidad es uno de los principales atractivos de la Golden Visa, y uno de los grandes diferenciales con otros visados portugueses. Es ideal para aquellos que no desean comprometerse con una mudanza permanente, pero que quieren mantener una conexión con Portugal y disfrutar de los beneficios de la residencia en la Unión Europea.
De esta forma, al obtener la Golden Visa, el titular puede continuar viviendo en América Latina, y también garantiza que el tiempo para adquirir la ciudadanía portuguesa contará después de 5 años.
Beneficios del visado y derechos de residencia
El Visado D7 proporciona pleno acceso al sistema sanitario, a la educación pública y a otros servicios sociales en Portugal, además de permitir al titular trabajar en el país, siempre que se informe al Gobierno portugués.
La Golden Visa ofrece los mismos derechos de residencia, pero sin la necesidad de una estancia continuada, lo que la hace más ventajosa para quienes sólo desean un punto de apoyo en Europa sin comprometerse a una residencia permanente. Con la Golden Visa, el titular y su familia tienen derecho a circular libremente por el espacio Schengen y disfrutar de las ventajas de vivir en Europa sin los requisitos de residencia más estrictos.
Como veremos más adelante, ambos visados permiten adquirir la nacionalidad portuguesa, siempre que se mantenga el permiso de residencia en vigor durante 5 años. Es importante tener en cuenta que, en el caso del visado D7, se exigirá de nuevo una prueba de ingresos pasivos al renovar el visado, y en el caso de la Golden Visa, es necesario mantener la inversión realizada durante 5 años.
Vía de acceso a la ciudadanía portuguesa
Ambos visados permiten acceder a la nacionalidad portuguesa tras cinco años de residencia legal.
El Visado D7 exige residencia continuada, y ya no es necesario cumplir requisitos adicionales de integración, como el conocimiento de la lengua portuguesa y vínculos efectivos con la comunidad local.
La Golden Visa no exige residencia continua, sino simplemente cumplir el requisito de estancia mínima.
La flexibilidad de la Golden Visa permite a los inversores mantener sus intereses globales al tiempo que obtienen la ciudadanía de un país europeo, lo que ofrece una ventaja estratégica significativa para aquellos que buscan opciones de movilidad internacional.
Proceso de solicitud y documentación necesaria
Para el visado D7 es necesario acreditar ingresos pasivos, seguro médico, prueba de alojamiento en Portugal y certificado de antecedentes penales. Además, el solicitante debe demostrar que dispone de alojamiento adecuado, lo que implica acreditar un contrato de alquiler o la propiedad de un inmueble.
Para la Golden Visa, la documentación implica la prueba de la inversión realizada, como documentos bancarios que demuestren la transacción financiera, así como la necesidad de obtener un número de identificación fiscal y abrir una cuenta bancaria local.
El proceso de solicitud de la Golden Visa puede ser más sencillo en algunos aspectos, ya que no requiere pruebas de ingresos continuos, pero sí exige realizar la inversión antes de que comience el proceso de solicitud, lo que implica un compromiso financiero importante desde el principio.
Pero, ¿qué visado elegir: el Visado D7 o la Golden Visa Portugal?
La elección entre el Visado D7 y la Golden Visa depende de los objetivos individuales y de las circunstancias financieras de cada solicitante.
El Visado D7 es ideal para quienes deseen establecer su residencia en Portugal de forma continuada, especialmente jubilados o personas con ingresos pasivos que busquen un traslado permanente.
Proporciona la plena integración en la sociedad portuguesa, incluido el trabajo y el acceso a los servicios sociales, permitiendo al titular establecer una profunda conexión con el país.
La Golden Visa, por su parte, se recomienda a los inversores que buscan una opción de residencia flexible, sin necesidad de trasladarse a Portugal de forma permanente. Esta opción es especialmente ventajosa para quienes desean obtener los beneficios de un régimen de residencia europeo manteniendo al mismo tiempo sus actividades profesionales o familiares en otro lugar.
Cada una de estas alternativas tiene sus propias ventajas, y la elección correcta dependerá de las prioridades y del estilo de vida del solicitante.